La flor de dalia es preciosa y la planta es muy fácil de cultivar con unos cuidados mínimos, tanto en el suelo del jardín como en macetas. Hay numerosas especies diferentes de dalia y muchísimos cultivares de una gran variedad de colores y formas. Si te gusta, plantéate plantar bulbos de dalia. Te contamos todo lo que necesitas saber sobre sus cuidados, durante cada temporada, para que en verano disfrutes de sus bellas flores.
Cómo es la dalia
La dalia es una planta vivaz. Esto significa que es perenne pero en invierno se desprende de toda su parte aérea: hojas y ramas. Se trata de una planta tuberosa, igual que la patata o el boniato. La raíz es un tubérculo, una especie de bulbo ramificado alrededor del cuello de la planta. Los bulbos de dalias se plantan en invierno, la planta se desarrolla durante la primavera y florece en verano. No es la primera vez que yo planto bulbos de dalias en mi jardín. La flor de dalia me parece de las más bonitas que hay, llenas de color con delicados pétalos. Se pueden plantar tanto en el suelo del jardín como en macetas.
La preciosa flor de dalia
La dalia es una flor muy apreciada por su belleza ornamental, tanto en el jardín como para flor cortada. Es una planta de bajo mantenimiento, que ofrece una gran producción de flores para los pocos cuidados que requiere y crece formando exuberantes matas que florecen desde el principio del verano hasta finales de otoño con las primeras heladas.
La planta de dalia no muere con el frío, sus raíces tuberosas soportan sin problemas heladas de -6ºC e incluso temperaturas inferiores si se protegen con un buen acolchado durante el invierno. Ni que decir tiene que en mi región, junto al Mediterráneo, no hay problemas en este sentido. Pero si se esperan heladas muy fuertes conviene desenterrar los bulbos de dalia.
El género Dahlia pertenece a la familia de las Asteraceae y las hay de muchos tipos. Algunas son plantas herbáceas y se comportan como vivaces, su parte aérea desaparece en invierno y vuelve a brotar a la siguiente temporada. Otras son arbustivas y perennes, desarrollan un fuerte sistema de raíces en forma de tubérculos. Son nativas de las montañas de México y Guatemala, donde los aztecas las aprovechaban como plantas culinarias y medicinales. La Dahlia coccinea es una de las especies más antiguas, una flor sencilla pero muy vistosa que crece en pedregales y márgenes de los caminos en su hábitat natural y de la que provienen gran parte de las dalias cultivadas.
Consejos para el cultivo de la dalia
- Planta los bulbos de dalia a finales de primavera
- En un lugar donde reciban de 6 a 8 horas de sol
- Con suelo ligeramente ácido (agregua arena, turba o estiércol si es necesario)
- Espera hasta que los brotes de dalia hayan aparecido por encima del suelo para regar
- Riega profundo de 2 a 3 veces por semana, con manguera o goteros, durante al menos 30 minutos
- Abona cuando hayan brotado y cada 3 o 4 semanas hasta principios del otoño
- Pellizca los tallos para estimular plantas más frondosas
- Pon estacas para sujetar los tallos florales más altos
- Cuando se marchiten por el frío del otoño, cubre con acolchado y deja los bulbos de dalia en el suelo hasta la siguiente primavera. En lugares donde hiela mejor desenterrar los tubérculos y guardarlos para plantar en la próxima temporada.
Cuándo plantar dalias
El mejor momento para bulbos de dalias es en primavera, después de que haya pasado el peligro de heladas.
En muchas regiones, el momento perfecto para plantar bulbos de dalia es entre mediados de abril y principios de junio. Puedes comprobar las fechas de las últimas heladas en tu zona para estar seguro. Como regla general, ya no conviene plantar dalias después de mediados de junio.
Cuando plantes bulbos de dalia, la temperatura del suelo debe ser de al menos 15ºC. A los bulbos de dalia no les gusta el suelo frío y si los plantas demasiado pronto pueden tener dificultades para crecer.
Cuidados de la dalia
Las dalias requieren un suelo fértil, húmedo pero bien drenado, y un lugar soleado y protegido. Las variedades más altas necesitan soporte. En caso de inviernos muy fuertes desentierra los bulbos de dalia en otoño y guárdalos en un lugar protegido de las heladas (un invernadero, cobertizo o en casa). Planta las dalias en una maceta a principios de abril para que vuelvan a crecer y luego, a partir de mayo, plántalas en el jardín.
Suelo
Los bulbos de dalia son propensos a pudrirse si no se plantan en el tipo de suelo correcto. Requieren suelo suelto, rico en nutrientes y con buen drenaje para prosperar. No son muy exigentes con el pH del suelo, pero generalmente crecen mejor cuando es ligeramente ácido. Evita los suelos arcillosos que retienen demasiada humedad y no dejan que el oxígeno llegue a las raíces. Para las plantas de dalia en macetas, elije una mezcla para macetas de alta calidad y mejórala con arena o perlita para asegurar un excelente drenaje.
Luz
Las plantas de dalias requieren muchas horas de sol directo, ésto es esencial para que estén sanas y den muchas flores. Prosperan con 6 a 8 horas de sol directo, especialmente la luz del sol de la mañana. Si en tu región hace mucho calor y tienes algunas duda sobre si poner tus dalias al sol o a la sombra, te puedo aconsejar que a medio día estén en un lugar protegido de los intensos rayos solares, se pueden quemar. Busca un emplazamiento donde reciban el sol a primeras horas del día pero ya no incida por la tarde. También es conveniente protegerlas del el viento.
Riego
En lo referente al riego de las dalias, las necesidades pueden variar mucho según las condiciones de cultivo. Si la planta aún no ha brotado, el tubérculo de dalia solo debe regarse cuando el suelo está seco. Cuando el bulbo de dalia ya ha comenzado a crecer, debes regar periódicamente para mantener el sustrato húmedo y así favorecer un crecimiento exuberante y una buena floración.
Generalmente hay que regar las plantas de dalia dos o tres veces por semana. Al regar debes evitar mojar el follaje de la planta para prevenir enfermedades por hongos. Los riegos deben ser largos y profundos, esto significa regar lentamente durante un buen periodo de tiempo. De esta manera conseguirás un buen desarrollo de las raíces y plantas más fuertes.
Temperatura
Las temperaturas ideales para la planta de la dalia están en el rango de 20° a 22°C. Temperaturas más altas acelerarán la floración y pero perjudican a la planta. La teoría dice que se deben evitar temperaturas superiores a 27 °C. No es imposible cultivar dalias donde hace más calor (como es mi caso), pero es cierto que no se consiguen plantas tan bonitas.
En cuanto a las temperaturas mínimas, el tubérculo de la dalia puede mantenerse en el suelo si no hay riesgo de heladas fuertes. Por debajo de -6ºC se pueden helar, por lo que es recomendable sacarlas del suelo.
Abonado
Las dalias son plantas voraces que necesitan mucho alimento para prosperar. Se benefician de los abonos orgánicos (estiércol, humus, etc.), que se pueden aplicar en cualquier momento: antes de planta, en el momento de plantado o durante la temporada de crecimiento. Esto mejorará también el suelo.
También se pueden aplicar fertilizantes comerciales. Estos productos llevan unos componentes indicados con 3 números (N-P-K): el primer número indica la cantidad de nitrógeno, el segundo número indica el fósforo y el tercer número el potasio. Lo recomendable es usar fertilizantes bajos en nitrógeno, y altos en potasio y fósforo. La primera aplicación de fertilizante debe hacerse aproximadamente 3 semanas después de la siembra y repetirse cada 3 o 4 semanas durante la temporada. Sigue las instrucciones del fabricante el modo y cantidad de aplicación.
Plagas y enfermedades
Si observas que aparece un polvillo blanco sobre los tallos o las hojas de la planta es señal de que el aire no circula bien entre las ramas de la dalia. Este polvo blanquecino puede ser oidio o mildiu, unos hongos microscópicos que prosperan con la humedad y el calor. Para eliminarlo puedes rociar la planta con azufre y para prevenir su aparición, brinda a las plantas más espacio para que tengan mejor circulación de aire.
Los saltamontes también pueden ser un problema, les encantan las hojas tiernas de las dalias. Los puedes ahuyentar con un preparado a base de una mezcla de una cucharada de alcohol isopropílico y otra de jabón potásico en medio litro de agua. Rocía la planta con el preparado a intervalos de 3 a 5 días hasta que observes que los saltamontes dejan de acudir.
Las dalias forman parte del menú favorito de caracoles y babosas. Los limacos son difíciles de erradicar, pero puedes poner trampas alrededor de las plantas para atraparlos y que no destrocen tus dalias: trampas de cerveza, cenizas o cáscaras de huevo. Existen productos químicos que acaban con ellas, pero son puro veneno y yo no os lo recomiendo.
Dalia, origen e historia
Las primeras referencias que existen sobre la dalia aparecen en el siglo XVI y proceden de los escritos de Francisco Hernández, médico de la corte de Felipe II en una expedición científica a la Nueva España con el fin de observar los recursos naturales de la colonia española. En la obra «Historia de las Plantas de la Nueva España», Hernández describe dos especies de dalia conocidas por los aztecas como Acocotli y Cocoxochitl, muy similares a las dalias que se cultivan en nuestros días. Pero las primeras semillas de Dahlia no llegaron a Europa hasta el siglo XVIII, concretamente al Real Jardín Botánico de Madrid donde se cultivaron y seleccionaron para producir los hermosos híbridos que ahora conocemos. Fue descrita por primera vez por el botánico Cavanilles, director del Jardín, quien envió semillas de Dahlia pinnata a los principales jardines botánicos europeos.
La flor de la dalia, descubierta por los indios Aztecas, conquistó el Viejo Mundo con su belleza, y durante los doscientos años de historia subsiguientes, se llegaron a producir miles de cultivares nuevos con mejoras genéticas para producir una enorme variedad de tamaños, formas y colores. Si quieres saber más sobre ellas, te invito a leer la entrada «Algunas curiosidades sobre las dalias«.
Dalia y otras Plantas para combinar con ella
No todas las combinaciones de plantas funcionan bien y no me refiero tan solo a nivel estético. Las raíces de la planta, bajo el suelo, compiten por los nutrientes y pueden robar a las que están a su lado el alimento que necesitan. Por tanto, hay que combinar plantas que sean capaces de absorber el agua y el alimento con capacidades similares. Estas son algunas plantas que se llevarán bien con nuestras dalias:
- Rosas
- Azucenas (Lilium)
- Vara de oro (Solidago)
- Asters
- Impatiens (Alegría de la casa)
Plantar dalias en macetas
Las dalias son plantas magníficas para cultivar en macetas, se adaptan muy bien porque no necesitan un suelo tan profundo como otros arbustos, pero deber ser una maceta de al menos de 30 cm de diámetro y otros tantos de profundidad. Antes de plantar el tubérculo deberemos llenar el contenedor con un sustrato universal al que incorporaremos tres o cuatro puñados de abono orgánico, introduciremos el tubérculo a unos 15 centímetros y cubriremos con sustrato. A continuación daremos un riego copioso que repetiremos dos veces por semana hasta que la planta crezca. Es mucho más recomendable regar pocas veces y en profundidad que hacerlos muy a menudo con riegos ligeros. Esto cambia cuando la planta comienza a florecer, entonces deberemos regar más a menudo. En verano, en climas calurosos, será necesario hacerlo todos los días.
Cómo Plantar dalias en el suelo del jardín
Si quieres cultivar dalias en el jardín, sigue los consejos de plantación anteriores excavando un hoyo de 30 centímetros de diámetro y otros tantos de profundidad. Introduce un buen sustrato, abono y el tubérculo. Si el suelo de tu jardín en muy arcilloso, conviene que agregues algo de arena para hacerlo más permeable. Si plantas varios tubérculos para hacer un buen macizo de dalias, deja una separación entre ellas acorde al tamaño final de cada planta para que el aire circule y evitar la aparición de hongos.
Cuándo plantar dalias
El mejor momento para plantar bulbos de dalia es en primavera, después de que haya pasado el peligro de la última helada. En climas cálidos se pueden plantar las dalias un poco antes, en invierno. Durante la primavera se desarrollarán nuevos tallos y las hojas. Cuando la planta ya tenga un buen sistema aéreo comenzará a producir flores. Esto ya será en verano. Como muy tarde puedes plantar dalias hasta junio. Si te retrasas la planta no prosperará adecuadamente y no florecerá.
Las plantas de dalia compradas en el vivero ya desarrolladas en maceta se pueden trasplantar en el mismo momento de la compra.
Corte de flores y poda
Las dalias son muy apreciadas para hacer ramos porque son muy decorativas. Para promover la producción de brotes laterales en los tallos de la planta y que produzca más flores, pinza por encima del tercer conjunto de hojas de cada rama. Dicen que las flores de dalia duran más si después de cortarlas se introducen en agua muy caliente y se deja enfriar.
Elimina las flores marchitas de la planta. Si las dejas, la energía de la mata se centrará en producir semillas y la producción de flores nuevas disminuirá. Si lo que te interesa son flores grandes, elimina todos los brotes laterales para que solo se forme una flor al final del tallo. Una planta de dalia bien cuidada produce flores sin parar hasta que llegan los primeros fríos.
Reproducción de la dalia
Los bulbos de dalia se pueden dividir en primavera u otoño para reproducirlos y tener nuevas plantas de dalia. Saca el tubérculo de la tierra con toda la delicadeza que puedas y utiliza un cuchillo afilado para cortarlo. Lo ideal es separar trozos que ya tengan tallo, para asegurar que desarrollarán una nueva planta. Pero incluso los trozos sin tallos podrían prosperar.
Dalia , Calendario de cultivo
Principios de primavera
- Es buen momento para dividir los tubérculos
- Es momento de plantar en macetas o en el suelo del jardín si ya no está frío
- Plantar los tubérculos a unos 15 centímetros de profundidad
- Regar con moderación una vez plantados y no volverlo a hacer hasta que brote la planta
- Fertilizar con un abono líquido 5-10-10 cuando la planta supere los 5 centímetros de altura
Mediados de primavera
- Continuar el abonado con fertilizante 5-10-10
- Eliminar malezas alrededor de la planta
- Observar y controlar la aparición de plagas
Finales de la primavera
- Cubrir con una capa de mantillo para evitar la evaporación de agua
- Aumentar el riego si hace mucho calor
- Poner estacas a las variedades altas para evitar roturas de tallos
- Pinzar los tallos para promover la producción de más flores
- Eliminar los brotes laterales si se desea menos flores pero de mayor tamaño
- Observar y controlar la aparición de plagas
Verano
- Continuar con los mismos cuidados descritos antes
- Cuidado extra con la aparición de hongos
Otoño
- Extraer los tubérculos si el frío del invierno no permite mantener las plantas en el jardín. Es buen momento para dividirlos
- Si el clima lo permite, dejar los tubérculos bajo tierra cubriendo con una capa extra de mantillo
- Retirar todo el follaje haya caído en el suelo del jardín
Cuidados de fin de temporada de la dalia
En lugares con heladas muy fuertes es conveniente extraer los tubérculos del suelo y almacenarlos hasta la siguiente temporada. Antes de sacarlos se debe dejar que las hojas y los tallos se marchiten por completo. Una vez desenterrados, los tubérculos se deben limpiar de tierra adherida y guardarlos envueltos con papel de periódico en un lugar oscuro, seco y fresco. Se deben retirar todas las hojas viejas que hayan caído en el suelo del jardín.
• • •
Seguro que conociendo bien los cuidados que necesitan las dalias, nuestras plantas crecerán sanas y vivirán más tiempo. Y a ti ¿te gustan las dalias?
Estupenda, completa y muy detallada información Mónica,
Seguro que éste año ya no te fallan.
Un abrazo
¡Yo tampoco he tenido suerte con las dalias, con lo bonitas que son! He leído atentamente tu post y me parece interesante tener en cuenta las indicaciones que nos das, también me gustan las fotos que has hecho.
Espero que tus dalias luzcan preciosas mucho tiempo, Mónica.
Mil besos.
Preciosa entrada Monica, a mi ya sabes que me encantan las Dalias porque lo llenan todo de color durante mucho tiempo y no me dan problemas, los que me dan problemas son los ratones que me las comen jajajaaa. Un besin.