El muérdago es una de las plantas con más tradición en la decoración navideña, junto al abeto o picea, el acebo y la poinsettia. En algunos países, la tradición sugiere que quienes se besan bajo la rama de muérdago, el día de Navidad, conseguirá el amor que buscan o consevarán el que ya tiene. En nuestro país, a pesar de que muérdago ha habido siempre en nuestros bosques, este rito lo hemos heredado de los países nórdicos y anglosajones, descendientes de los pueblos celtas y vikingos, para quienes ésta planta estaba cargada de simbolismo.
La tradición del muérdago
Los antiguos celtas consideraban el muérdago una planta sagrada y la utilizaban para elaborar pócimas mágicas u oficiar ceremonias bajo la protección de sus ramas. Una de las propiedades que le atribuían era la de potenciar la fertilidad. También los vikingos confiaban en las propiedades del muérdago, para ellos era la planta de la paz y les cobijaba cuando tenían que declarar la tregua al enemigo o si debían resolver problemas de pareja.
Estas supersticiones y prácticas ancestrales derivaron en el sencillo ritual de besarse bajo una rama de muérdago. Sus bayas blancas decoran nuestros hogares durante la Navidad, alentando la ilusión de que el amor perdure.
Viscum album
El nombre científico del muérdago es Viscum album, catalogada por Carlos Linneo en 1753 dentro de su obra Species Plantarum. Se trata de una planta semiparásita que vive sobre las ramas de algunos árboles y produce diminutas flores que maduran a finales de otoño y forman los frutos, esas pequeñas bayas blanquecinas que adornan las tradicionales ramas navideñas.
El muérdago es una especie clave para el mantenimiento de la biodiversidad, ya que sus frutos alimentan diversas especies de aves durante el invierno. Ellos son los encargados de la propagación de la planta, ya que después de comer sus bayas pegajosas, depositan la semilla limpiándose el pico en las ramas de los árboles.
El muérdago se alimenta de la savia de los árboles que parasita. Esto nunca ha sido un problema para los árboles sobre los que se desarrolla, pero en los últimos años comienza a considerarse relativamente peligroso para los bosques de pinos españoles. La acción del muérdago, junto a la fuerte sequía, se asocian a las elevadas tasas de defoliación y mortalidad de los árboles.
Preciosa entrada Monica, me encanta el Muérdago. En mi tierra no hay quizás por el frío. pero en el centro y oriente de Asturias lo hay en gran cantidad, no es difícil ver Manzanos y chopos con él. Un besin enorme.
Me encanatan las fotos y sobre todo lo que nos has contado del muerdago. Muchas y felices fiestas. Un abrazo.
Mucha magia tiene el muérdago, es una de las plantas más asociadas a la Navidad, aunque su magia venga de mucho antes.
Preciosas las fotos!
Muchos besos y FELIZ AÑO NUEVO 2018 lleno de felicidad y magia 😉