Dower House es una edificio histórico dentro de Morville Hall, una gran propiedad gestionada por el National Trust británico con un magnífico parque que cubre una extensión de más de 6000 metros cuadrados cerca de Bridgnorth, en Shropshire (Inglaterra).
Katherine Swift es la artífice del diseño de este parque, ella se instaló en Dower House en 1988 y desde entonces cuida y mantiene estos terrenos. Historiadora y escritora de horticultura, diseñó el jardín con la intención de contar la historia de la jardinería inglesa con una secuencia de espacios separados y definidos según el estilo de diferentes periodos históricos. Las rosas antiguas son la especialidad del jardín, al igual que el uso de plantas originales de cada época y las técnicas de construcción de aquel momento.
Su valor paisajístico lo muestran esta selección de imágenes, todas ellas publicadas en las más prestigiosas revistas de jardinería británicas: Hortus, Gardens Illustrated, House & Garden, The English Garden, Gardening ‘Which?’, Garden Inspirations, The Saturday Telegraph, etc. También aparece en la guía de los mejores jardines de The Daily Telegraph y de la Royal Horticultural Society.
Katherine ha sido columnista de horticultura en el periódico Times y ha escrito varios libros de jardinería, entre ellos, dos dedicados a sus trabajos en Morville: «Las horas de Morville», dedicado a la creación del jardín, y «El año de Morville», un diario con fotografías y dibujos del jardín en las distintas estaciones. En la actualidad trabaja en un nuevo título: «Una rosa de Morville»
Como os decía, el jardín está dividido en segmentos que recrean jardines de diferentes épocas:
El jardín del claustro está diseñado adoptando el estilo que tendría un claustro de mediados del siglo XV con un camino bordeado de tejo recortado y asientos de hierba, típicos de los ‘Hortus Conclusus’ del medievo, tal y como muestran las ilustraciones de obras literarias de la época.
Aquí una ilustración de una obra de Boccaccio donde se observa la estructura de un ‘Hortus Conclusus’.
El jardín del nudo con su intrincado patrón de hierbas olorosas, imita a un jardín ya adentrado el siglo XVI. Es un jardín medicinal, de suministro para la botica de las casas nobles de aquella época.
El Plat recoge la esencia de los jardines de recreo del siglo XVII, un lugar para dar largos paseos a la sombra de membrilleros y nísperos contemplando las camas de antiguos tulipanes a los pies de los árboles.
El jardín del canal y el jardín de flores son dos jardines de estilo barroco. El primero cuenta con un estanque de agua que jamás faltaba en un gran jardín del siglo XVIII rodeado por una extensión de césped brillante. En el segundo está inmerso el típico templete griego y la rosaleda, repleta de rosales antiguos cuyas flores cuelgan formando cascadas de color.
Del siglo XX es representativa la frontera de rosas de estilo Victoriano (finales del XIX) donde destacan las masas de peonias de color rosa, y el jardín de fruta y verdura de estilo Eduardiano (comienzos del siglo XX), con sus túneles de manzanos y perales festoneados con rosas blancas.
En el centro del parque destaca el intrincado laberinto de tejo basado en un diseño que data de la Edad del Bronce. Un elemento clásico que tampoco faltaba en los grandes jardines de época Tudor para deleite y disfrute de los cortesanos.
Las partes formales del jardín están rodeadas por altos setos de tejos, que dan al jardín un aire de gran antigüedad. Fuera de los setos de tejos, y en fuerte contraste con el jardín interior, hay variaciones sobre el tema de la jardinería natural: Al norte, un jardín natural de finales del siglo XIX con rosas silvestres de todo el mundo donde también otras flores silvestres inglesas como jacintos, leucojums y camassias. Al sur, una pradera de gramíneas y bulbos silvestres de narcisos, fritillarias y tulipanes.
Completa el jardín un pequeño bosque de limas, arces, viburnos, evónimos y rosas canina al que se accede por un paseo bordeado por ciruelos. Junto a la paredes del jardín crecen fronteras de iris, crocus y galanthus. Junto a la casa hay un pequeño jardín formal de hiedra que da servicio a la casa como sala exterior y donde en verano se sirve el clásico té.
El jardín presenta algún punto de interés a lo largo de toda la temporada: entre abril y mayo es impresionante la exhibición de tulipanes y demás bulbos. En junio es la mejor época para disfrutar la visión de las rosas, mientras que julio y agosto son el momento de los agapantos y las clematis. En septiembre es el mejor momento para disfrutar la floración de los asters y los frutos de una gran variedad de manzanas.
En Reino Unido hay una gran cantidad de jardines fabulosos para visitar, pero si éste te tienta y quieres saber más sobre él, puedes ampliar información en su página de FB.
precioso y muy didactico