Jardín botánico de Asuán, una joya verde en las eternas aguas del Nilo

El Jardín Botánico de Asuán ocupa toda la superficie de El Nabatat, una isla bañada por el Nilo frente a la ciudad de Aswan (Asuán). La isla alberga una impresionante colección de especies vegetales exóticas, y es el hogar de miles de aves. Dicen que pasear entre sus majestuosos árboles es una de las atracciones más agradables y relajantes de la ciudad. Especialmente al atardecer, cuando la luz es suave y el aroma del sándalo flota en la brisa.

Historia del Jardín Botánico de Asuán

El Nabatat es una de las islas más antiguas de Egipto. Se formó por sedimentos de limo que el Nilo fue depositando sobre rocas de granito durante millones de años. Estuvo habitada por los nubios desde la antigüedad, hasta que los británicos la ocuparon a finales del siglo XIX. En 1899 el Lord inglés Horatio Kitchener desembarcó en la isla con la finalidad de sofocar la revolución mahdista en el sur del país.

Kitchener inició lo que hoy en día es el Jardín Botánico de Asuán. Construyó un edificio desde donde dirigir su campaña en una isla casi desértica. La necesidad de sofocar el intenso calor del verano le llevó a complementar la escasa masa vegetal que rodeaba al cuartel. Encargó a los soldados, pertenecientes a diferentes países de India, África Central e incluso del Lejano Oriente, que tras sus vacaciones volvieran con plantas y árboles para aplacar la intensidad del sol. De ahí procede la diversidad que hoy en día se puede contemplar en el lugar. El edificio militar todavía existe hoy y es donde se encuentra la administración del parque actual

Con ayuda del Ministerio de Irrigación egipcio, encargado de gestionar los recursos hídricos del país, Kitchener transformó la pequeña y desértica isla. El Nababat se convirtió en en un impresionante exuberante vergel de 6,8 hectáreas con algunas especies autóctonas y muchos ejemplares importados. Destacan la palmera real (Roystonea regia) o la palmera sabal (Sabal palmetto), y árboles exóticos como el Bombax ceiba

Jardín Botánico de Asuán, en el Nilo (📷 Norbert Trewin)

Diversidad botánica del Jardín Botánico de Asuan 

El Jardín Botánico de Asuán alberga una amplia colección de árboles, algunos con más de 100 años de vida. La isla está dividida por 4 caminos longitudinales y 9 senderos transversales que forman una cuadrícula de 27 sectores diferentes. Las plantas están agrupadas según sus hábitos de crecimiento. El más importante es el grupo de árboles madereros, como Ebano, Caoba, sándalo (Santalum album), tamarisco (Tamarix), neem (Azadirachta indica), roble (Quercus), Bauhinia, etc. Le sigue el grupo de árboles frutales tropicales, como papaya (Carica papaya), níspero (Eriobotrya japonica), mango (Mangifera indica), entre otros.

El jardín es rico en plantas medicinales y aromáticas, como el tamarindo (Tamarindus indica), algarrobo (Ceratonia siliqua), moringa (Moringa oleifera), etc. También contiene plantas de especias, por ejemplo chile (Capsicum annuum), canela (Cinnamomum verum) y pimienta (Piper nigrum); plantas ornamentales, como jazmín (Jasminum), geranio (Pelargonium), tulipán (Tulipa) y petunia (Petunia). Abundan los árboles oleaginosos: olivo (Olea europaea), cocoteros (Cocos nucifera) y palmas de aceite (Elaeis guineensis).

El grupo de palmeras es el que más atrae a los visitantes: palmeras dum (Hyphaene thebaica), cocoteros (Cocos nucifera), palmeras datileras (Phoenix dactylifera). Las palmeras reales (Roystonea regia) que bordean los paseos del jardín, con sus altos troncos de color blanco, en delicada armonía.

Paseo bordeado de palmeras reales (📷 Don)

El Jardín en la actualidad

El Jardín Botánico de Asuán es muy popular entre los lugareños, quienes lo visitan con frecuencia. Es un lugar apacible donde pasear o hacer picnics en familia los fines de semana. También es un espacio privilegiado para los observadores de aves. Dependiendo de la estación se pueden contemplar una gran diversidad de aves, nativas y migratorias.

Pero el Jardín Botánico de Asuán es mucho más que un bonito espacio verde. Cumple la función de reserva natural para preservar la biodiversidad. Es, además, un importante centro de investigación botánica que estudia la viabilidad y el desarrollo de las plantas en el clima egipcio.

El centro científico y de investigación del Jardín Botánico de Asuán contiene una biblioteca científica, realiza cursos de formación y acoge simposios científicos. Dispone de un herbario botánico con material de todos los árboles del jardín y completa información sobre los mismos. El Jardín Botánico de Asuán cuenta con modernos laboratorios de cultivo de tejidos vegetales, un destino interesante para quien desea estudiar geología y biología antigua. 

Imagen de cabecera: Malcom Bott

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1 comentario en «Jardín botánico de Asuán, una joya verde en las eternas aguas del Nilo»

  1. Si que debe ser una gozada pasear por esos bellos y exóticos jardines, todo un placer para los sentidos.
    Gracias por mostrar y hablarnos de esa gran belleza.
    Un gran abrazo Mónica.

Los comentarios están cerrados.

       

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