Bergheim

Bergheim, con sus encantadoras casas y callejas llenas de flores, reúne todas las cualidades para convertirse en el escenario de un cuento de los hermanos Grim.

Situada en el corazón de los viñedos alsacianos, Bergheim es una de las pocas ciudades del alto Rhin que conserva intactas sus murallas medievales, construidas en el siglo XIV alrededor de sus pintorescos edificios también conservados.

Los orígenes de la ciudad son inciertos, aunque el descubrimiento de restos romanos atestigua la existencia de un asentamiento del imperio. Durante la Edad Media pasó de mano en mano de señores feudales: duques, condes e incluso obispos el dominio de la villa y los fértiles valles que la rodean. En 1313 fue el final de este ir y venir. Henri de Ribeaupierre, una familia poderosa, la fortificó y ofreció al emperador Enrique VII como feudo. El emperador le concedió el rango de ciudad libre y la dejó bajo la tutela del señor de Ribeaupierre.

Pero el pasado de la ciudad tiene también su lado oscuro. Entre 1582 y 1683 se llevaron a cabo varios juicios por brujería que acabaron con más de 40 mujeres condenadas a la hoguera. Los registros de aquellas historias se guardan el el museo de la ciudad, La Maison des Sorcières. En sus registros se relata lo acontecido con aquellas brujas.

En el Jardín d’Annette, que también data de aquella época, se cultivan plantas medicinales como se hacía en aquellos tiempos, cuando las hierbas servían a la botica de la población.

Todo esto es lo que he entendido leyendo algunas páginas en francés y alemán para recopilar información sobre Bergheim. Para disfrutar de esta bonita ciudad habría que conocer todo esto in situ, pero mientras llega el momento, nos conformaremos con las lecturas y las preciosas fotografías del lugar. Espero que os gusten tanto como a mi.

También te puede interesar:

2 comentarios en «Bergheim»

Los comentarios están cerrados.

       

Newsletter

Apúntate y recibe nuestras publicaciones en tu correo

* Necesario