El Campo del Moro es un jardín extenso y romántico de estilo paisajístico inglés que forma parte del grupo de jardines que rodean el Palacio Real de Madrid. Ocupa una superficie de 20 hectáreas que cubren el desnivel topográfico que hay entre la fachada occidental del palacio y el río Manzanares. Su carácter histórico hace muy recomendable recorrerlo y disfrutar de su vegetación y su arquitectura.
Historia del jardín
La historia de los jardines de Campo del Moro arranca durante el reinado de Felipe II (1527-1598) quien encargó un proyecto para acondicionar el desnivel entre el Alcázar (edificio anterior al palacio) y el río. El proyecto no comenzó hasta que Felipe IV, que utilizaba la zona para practicar la caza, mandó plantar diferente especies arbóreas.
Los siguientes monarcas, Felipe V y Carlos III, se encargaron de continuar la construcción del Campo del Moro encargando nuevos trazados del parque. Estos planes tampoco llegaron a finalizarse bajo el reinado de estos monarcas.
Fue Juan de Villanueva el arquitecto que finalmente completó la ejecución del proyecto de los jardines de Campo del Moro, ya bajo el reinado de José I. Recibe su nombre por haber sido campo de asentamiento de un caudillo musulmán en un ataque a la ciudad.
Durante el reinado de Isabel II (1830-1904) se realizó un nuevo diseño que constituyó el trazado definitivo. A pesar de los daños que sufrió el parque del Campo del Moro durante la Guerra Civil española (1936-1939) se restauró en los años 40 del siglo XX y su gestión es responsabilidad de Patrimonio Nacional.
Visitar los jardines de Campo del Moro
Los jardines de Campo del Moro se pueden visitar, y yo diría que es muy recomendable no perdérselo si visitas la capital española. La entrada es gratuita y se puede acceder a él todos los días de la semana. Además de recorrer el jardín puedes acercarte y ver otros sitios de gran interés que están muy cerca: el Palacio Real, el Real Monasterio de la Encarnación o la Real Basílica de Atocha.
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