Si has leído las entradas que he escrito sobre invernaderos victorianos, comprenderás que mis gustos decorativos distan muy mucho de ser minimalistas. No es que me incline hacia lo recargado y barroco, pero sí que me gustan los espacios llenos de objetos bonitos siempre que estén bien coordinados y ordenados.
Uno de los estilos arquitectónicos y estéticos en general que más me gusta es el Art Nouveau y ante las dudas que a menudo me surgían al ver un determinado edificio o una pieza de mobiliario, he decidido detenerme a investigar y aprender a reconocer lascaracterísticas del estilo.
Quizas pienses «hoy no vas a hablar de jardinería». Pues en cierto modo sí, porque el Art Nouveau – o modernismo, en España- influyó también en el diseño de jardines.
Banco de jardín
Para comprender cómo nació el Art Nouveau hemos de retroceder en el tiempo hasta la década de 1850 y situarnos en los años de la Revolución Industrial. El nivel de vida de la sociedad (en general) sube y la gente, con más posibilidades económicas, comienza a desear las cosas que antes sólo los ricos podían permitirse. Con la mecanización la producción se abarata y se imitan los productos de lujo, haciéndolos más accesibles para todo el mundo.
Evidentemente ésto no fue del agrado de los artesanos tradicionales que perseveraban en realizar productos hechos a mano y con calidad. En Reino Unido surgió el movimiento «Arts&Crafts«, que insistía en crear productos manufacturados, hermosos y accesibles para todas las clases.
En 1892, el artista e ilustrador de libros Walter Crane (1845-1915) escribió «The claim of decorative art», inspirando a muchos artesanos de su generación y de generaciones posteriores. Este movimiento artístico se extendió por el resto de Europa, se dejaron de copiar los estilos antiguos y se evolucionó hacia la creatividad inspirada en la naturaleza.
El ideal de crear belleza entorno al hombre ordinario fue un éxito artístico, abarcó todos los campos: arquitectura, mobiliario, joyería, iluminación, utensilios del hogar, tipografía y diseño gráfico, etc. El arte se planteaba como un estilo de vida, pero socialmente resultó un fracaso, ya que era lujoso y demasiado caro para la gente común.
Valla de jardín
El nuevo estilo se extendió en muchos países al mismo tiempo, denominándose de una manera distinta en cada país:
Art Nouveau (Francia, Bélgica)
Jugendstil (Alemania)
Nieuwe Estilo (Países Bajos)
Modern Style o estilo Liberty (Reino Unido)
Arte Nova (Portugal)
Modernismo (España)
Secesión (Austria)
Secesija (Croacia)
Stil Moderno (Rusia)
Cada país o zona geográfica aportó elementos diferenciadores al estilo, pero existen determinadas características que todas las variedades tienen en común:
Inspiración en el presente
Visión optimista del mundo
Tendencia a la asimetría
Líneas fluidas
Motivos basados en la flora y fauna
Azulejos y cerámicas esmaltadas intercalados con ladrillo
Materiales coloridos y luminosos
Uso de técnicas y materiales modernos: superficies grandes de vidrio, de hormigón, de hierro fundido y acero.
Kiosco Art Nouveau
Las líneas fluidas y con movimiento son probablemente la característica más conocida del Art Nouveau. Expresan la emoción de este nuevo período y las encontramos en balcones, barandillas, fachadas, etc. Y sí, también en objetos para el jardín como cancelas de puertas, marquesinas, kioscos, mobiliario, etc.
Los motivos, basados en la flora y la fauna, son figuras estilizadas, plantas de tallo largo y flores, cisnes, pavos reales, libélulas, nubes, agua y figuras femeninas delgadas con largos cabello y vestidos ligeros y fluidos.
Parque Guell, Barcelona.
Gracias a la industrialización, los azulejos experimentaron un renacimiento importante. Eran fáciles de lavar y se comenzaron a utilizar en los cada vez más populares cuartos de baño y en las cocinas. Junto al vidrio, el hormigón, el hierro fundido y el acero, son nuevos materiales de los que disponen los artistas de la época para elaborar sus diseños. Seguro que los habrás visto en jardines antiguos.
Durante la segunda mitad del siglo 19 se popularizó el uso de grandes superficies acristaladas en edificios y se construyen muchos invernaderos gigantescos con estructuras de hierro y cristal.
Invernadero de hierro y cristal
Hacia finales de siglo se perfecciona el uso del hormigón armado, esto permite la construcción de edificios cada vez más grandes, resistentes y en plazos de tiempo cada vez más cortos. Es el desarrollo de la arquitectura modernista.
El Art Nouveau fue sustituido por otros estilos durante el siglo XX: contemporáneos, minimalistas e incluso futuristas. Personalmente opino que en cualquiera de ellos se puede encontrar belleza, pero esas figuras estilizadas de inspiración natural del Art Nouveau son mi debilidad.