Visitar la Alhambra y sus jardines

Visitar la Alhambra es una delicia en cualquier época del año y aunque las circunstancias nunca me han permitido pisarla durante la primavera, el otoño es una estación que imprime en sus jardines un colorido mágico. El frío de la sierra que la acompaña y de donde procede el agua que le da la vida, no consigue robar la calidez a un monumento que, más que fortaleza o palacio, es la confluencia de arte, vida, pasión y embrujo. Poner un pie en sus recintos es hacer presente los siglos de historia que atesora entre sus murallas. Apasionada confesa de la Historia de España en los últimos años de la Edad Media, hoy os invito a contemplar algunas vistas de la fortaleza roja y ciudad palatina de la Alhambra.

La Alhambra nunca fue proyectada como la unidad que es hoy en día sino como una sucesión de construcciones que se añadían a las existentes a capricho y voluntad de los diferentes sultanes que se alternaron, monarcas absolutos. Su origen es una antigua Alcazaba del siglo IX ubicada en el cerro La Sabika y donde al-Ahamar, primer rey de la dinastía Nazarí, decidió instaurar su residencia y corte. Todo esto sobre el año 1238.

El reino nazarí se prolongó durante poco más de 250 años y contó con 22 sultanes diferentes. La población de la ciudad fue creciendo a causa del avance de las conquistas cristianas en otras regiones que empujabana la población a refugiarse en Granada, las clases bajas se amontonaban en las barriadas del Albaicín o el Sacromonte mientras los linajes aristocráticos, los funcionarios del Estado y los alfaquíes (intérpretes del Corán) vivían dentro de la Alhambra, junto al Sultán y formando una ciudadela dentro de la ciudad de Granada.

Reproducir por escrito toda la información que recibimos durante un paseo de 4 horas por los edificios y jardines de la Alhambra y Generalife se me antoja complicado, sobre todo cuando yo misma me quedé con ganas de saber más y a cada palabra que escribo se me van los ojos al libro que compré en mi visita para no perderme un detalle. Intentaré dejar de lado la historia y hacer un resumen de la visita y las diferentes zonas que pudimos contemplar.

Las primeras imágenes de la ciudadela las obtuvimos desde la terraza del hotel, desde allí pudimos contemplar su perfil sobre la colina a la puesta de sol. La Torre de la Vela, la mayor de la Alcazaba.

El segundo día de nuestra visita recorrimos el Albaicín, el antiguo barrio árabe donde residía el pueblo llano y daba servicio a los ilustres a la clase alta, quienes vivían dentro de la fortaleza. Pasear por sus callejas es emocionante, está repleto de jardincillos y cármenes, viviendas típicas granadinas rodeadas de un jardín que a la vez sirve de huerto.

A los pies de la Alhambra y separándola del Albaicín corre el río Darro, un pequeño afluente del Genil que a día de hoy es poco más que un arroyuelo. La calle junto a la que transcurre recibe los nombre de Carrera del Darro o Paseo de los Tristes, aunque el oficial es Paseo del Padre Manjón. El nombre Paseo de los Tristes le viene dado porque en tiempos era el recorrido de los cortejos fúnebres hacia el cementerio y, a pesar del nombre, la avenida es una calle preciosa con unas glicinias espectaculares y maravillosas vistas a la Alhambra.

Subiendo por el antiguo barrio árabe, entre calles empinadas y empedradas llenas de hojas -por las que pasear se hace complicado- se recorren plazas y miradores con vistas magníficas del cerro de Sabika y los palacios. Desde el mirador de San Nicolás, la visión de la Alhambra, el Palacio de Carlos V, el Generalife y el bosque que la rodea es un verdadero espectáculo. Os dejo con las fotos de estos primeros dos días de excursión. Las hay más bonitas en la red, pero quiero compartir las mías y espero que os gusten.

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3 comentarios en «Visitar la Alhambra y sus jardines»

  1. Estuve en Granada de paso y no pude ver la Alhambra, además llovía a cántaros, así que fíjate lo que me gusta ver esos jardines y esas cuestas a través de tus fotos. Unas fotos preciosas, con el color y el encanto propios del otoño que resultan muy atractivas.
    Ha sido un placer!!
    Muchos besos.

  2. Me ha encantado el paseo por el que nos has llevado, me he sentido de nuevo en la Alhambra y en sus alrededores. Las fotos fantásticas. Un abrazo desde Plantukis.

  3. Gracias a ambos por vuestros comentarios, pero esto sólo ha sido un acercamiento. Pronto las fotos dentro del recinto.
    Un beso!

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