Central Park, orígenes e historia

Andrew Holmes

Ayer os hablaba sobre Central Park de una manera relajada, compartiendo fotos de mi álbum familiar y contando la experiencia de un paseo por el parque. Las fotografías de ese día no son ninguna maravilla y lo que os contaba no profundiza en el concepto del parque en sí. La entrada de hoy es un poco larga, pero si te apasiona la historia de los parques tanto como a mi, es muy posible que te guste.

Vamos a acercarnos al origen y la historia del parque para entender el concepto de este magnífico jardín concebido antes de la gran expansión de la ciudad e influenciado, desde sus orígenes, por el pintoresquismo y el paisajismo inglés.

La entrada es un poco larga, pero si te apasiona la historia de los parques tanto como a mi, es muy posible que te guste. Las fotos, en esta ocasión, las he tomado de flickr, de visitantes que tomaron mejores imágenes.

Un poco de historia

Los primeros asentamientos europeos en Manhattan datan del siglo XVII, cuando los Holandeses descubrieron la isla y se establecieron en ella fundando la colonia Nueva Amsterdam. Eran años de rivalidad marítima entre Holanda e Inglaterra por la conquista de nuevos territorios en América del Norte y en 1665 los ingleses se impusieron e incorporaron la plaza a sus 13 colonias de la Norteamérica británica. El rey Carlos II donó esta tierra a su hermano, el Duque de York, y la rebautizó como Nueva York en su honor.

Nueva Amsterdam (1660) Librería pública de Nueva York

El asentamiento holandés y posteriormente el británico se reducían a un pequeño grupo urbano al sur de la isla, en el interior de un recinto amurallado. Por entonces los jardines eran espacios privados que pocos privilegiados podían poseer, allí se cultivaban hierbas culinarias, medicinales, aromáticas, etc., siguiendo los modelos aprendidos en Europa pero sin tiempo ni recursos para aplicar la imaginación más allá de lo relativo a la subsistencia.  Aún así y a la vista de los planos de la época, se puede apreciar el refinamiento europeo en los diseños y trazados. Al norte, toda la isla era una zona boscosa con senderos que comunicaban diferentes asentamientos indígenas.

En el siglo XVIII la población de las colonias inglesas en América había crecido considerablemente y se extendían ánimos independentistas que desembocaron en la guerra civil. Tras la independencia del país -1876-, bajo un gobierno independiente del continente, pero con gran influencia británica en lo que a usos y costumbres se refiere, las ciudades continuaron su expansión.

Manhattan, 1811 –  Librería pública de Nueva York

Si volvemos a centrarnos en Manhattan, la isla se encamina a un crecimiento demográfico fabuloso que requería una ordenación urbanística. En 1811 se realiza sobre papel el Commissioner’s Plan trazando la expansión futura de la ciudad, una cuadrícula criticada por muchos por su aspecto monótono y aburrido en comparación con las tramas irregulares de las ciudades antiguas. El parque todavía no figura…, no son tiempos de pensar en el esparcimiento y, además, el campo es abundante.

El origen del parque

Es a mitad de siglo, conforme la ciudad va creciendo y las construcciones invaden bosques, explotaciones agrícolas y demás zonas verdes, cuando se percibe la necesidad de reservar algún espacio verde antes de que toda la ciudad esté edificada. Se indultan 153 manzanas para albergar el parque en un lugar de rocas y ciénagas todavía sin explotar por la iniciativa privada y por el que el gobierno de la ciudad pagó más de 5 millones de dólares.

Para el diseño del parque fue seleccionada la propuesta presentada por Frederik Law Olmsted y Calvert Vaux, entre otros 33 proyectos. Al más puro estilo de los diseñadores británicos contemporáneos, concibieron un espacio manipulado y transformado para intensificar el efecto paisajístico. La naturaleza, exagerada artificialmente, emociona por la acumulación de imágenes y  sensaciones. Por decirlo de algún modo, habían llevado el estilo británico de diseño de parques y jardines a la sublimación.

Jessica Petersen

Vaux era un británico embaucado por el sueño americano de una sociedad sin clases que recalcaba el valor democrático y público del parque, un lugar donde difuminar las diferencias entre estratos sociales. Para Olmsted primaba el carácter saludable que ofrecía la naturaleza, el ocio y el descanso que proporcionaba la estancia en ella. Aunque ambos compartían el diseño general, el diseño arquitectónico corría a cargo del primero, mientras el segundo se ocupaba de la dirección general y el establecimiento de las normas de uso y disfrute.

Chung Chu

Nadie que mire actualmente el parque se puede imaginar que todo lo que hay en él es absolutamente artificial. Ciénagas drenadas y rocas movidas para luego construir lagos, caminos, puentes y plantar más de 500.000 árboles y arbustos…, pero de un modo tan natural que cuando te adentras en él parece que siempre hubiera estado ahí. La construcción del parque duró 15 años y se inauguró oficialmente en 1873.

Steve Guttman

Marianne O’Leary

De todas las esculturas que contiene Central Park, la fuente Bethesda es la única que se incluyó durante la construcción. Todas las demás han sido regalos a la ciudad: Strawberry Fields, Alicia, Balto, Andersen, Shakespeare, etc.

En la actualidad la conservación del parque corre a cargo de Central Park Conservancy, una empresa privada sin ánimo de lucro contratada por el Departamento de Parques y Ocio de Nueva York.

Gigi_nyc

Abajo dos fotos del mismo puente, el Willowdec Arch. A la izquierda en 1862 -antes de la inauguración- con los responsables de su diseño y construcción sobre él. A la derecha, su estado actual en nuestra visita al parque.

Fuentes: La naturaleza artificial de Central Park, Angel Martínez García-Posada

               Biblioteca Pública NY

               Wikipedia

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2 comentarios en «Central Park, orígenes e historia»

  1. Hola Monica. Aunque en mis sueños no esta Central Park reconozco que es impresionante y me encanta visitarlo en tu blog jajajajajaaa. Muchas gracias por compartirlo. Un enorme beso y se muy feliz.

    • Gracias Lola, me alegro que te gustara el paseo. Hoy has madrugado y has entrado antes de que yo incluyera el texto en la entrada, espero que lo leas si todavía no conoces su historia.
      Un beso!

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