¡Buenos días! Este sábado ha amanecido también con lluvia, pero una lluvia suave y fresca que es todo un placer para los sentidos. El jardín está rejuvenecido, las plantas más erguidas y, aunque no hay flores, parece que la primavera esté a punto de llegar. Con toda una semana de agua y sin cortar el césped, no os imagináis lo alto que está.
Pero hoy vengo a hablar debicicletas. Y es que me está rondando por la cabeza la idea de poner una en algún rinconcito del jardín para decorarla con plantas. Seguro que las habrás visto de esta manera en más de una ocasión, porque además de su uso principal como medio de transporte y entretenimiento, también se utilizan como decoración.
Lo ideal es disponer de una bicicleta realmente antigua, de esas tan bonitas que se fabricaban antes. Si aún conservas tu bici de la niñez, no dudes en darle una nueva vida, pero si no tienes una, puedes recurrir a una de las réplicas que se encuentran hoy en día en el mercado.
Con cualquier tipo de planta que se pongan en ellas pueden quedar preciosas, pero a mi personalmente me gustan con petunias, alegrías, hiedras y otras plantas colgantes. Las bicicletas de época le dan un aire retro al jardín y son un elemento decorativo muy interesante. Aquí algunos ejemplos:
Esta última imagen es de Petersham Nursery, un fantástico vivero londinense del que ya hablé en una entrada tiempo atrás. Si quieres conocerlo mejor, el enlace está aquí.
¡Feliz sábado y mejor domingo! Seguimos el lunes con más temas.
Este tema me chifla, ya sabes que soy una gran amante de las bicis, jajaja
Se le puede sacar muchísimo partido, así que te animo a instalar una bici decorativa en tu vida. Tengo una de niña esperando los días malos, esos que nos tendremos que quedar sin pisar la tierra y bajo techo, ya te enseñare el resultado. Y espero la tuya, que seguro que llega…
Un besín al equipo Guía de Jardín 🙂
Lo sé, Llosona, yo cada vez que veo una me acuerdo de tí 🙂