¿Recordáis una entrada que publiqué en junio pasado sobre pintar piedras? (Podéis verla aquí si no la conocéis) Pues hoy os traigo una manualidad similar, entretenida y divertida, para pasar un rato con los más pequeños y con la que podéis confeccionar bonitos adornos.
En este caso vamos a pintar hojas y lo hacemos de la mano de Carol y Eva, del blog Hadas y Cuscus, web en la que he encontrado ésta y muchas otras ideas simpáticas para hacer en familia.
Para comenzar hay que buscar algunas hojas, de esas que están a punto de caer de los árboles y arbustos en cuanto llegue el otoño, dentro de pocos días. Además necesitaremos pintura en spray y rotuladores permanentes, ambas cosas en colores brillantes para que nuestras hojas destellen con luz propia.
Siempre es mejor que las hojas sean grandes, lucirán mucho más. Para esta demostración, ellas eligieron algunas hojas de hortensia y las pintaron con motivos tribales asemejando plumas.
Una vez pintadas (y secas) colgaron las hojas con unas cintas de colores e incorporaron al conjunto algunos abalorios. Añadiendo unas fotos familiares y colgando todo en una caña, fabricaron un bonito móvil.
Se me ocurre que puede ser una buena forma de pasar la tarde entreteniendo a los niños. Pintamos hojas, colgamos fotos de las vacaciones y fabricamos bonitos recuerdos mientras rememoramos los momentos divertidos del verano.
¿Te gusta? Pues ánimo, ¡a recoger hojas! ¡Y no olvides darle al «me gusta»! 🙂
