Florilegium es un libro fascinante escrito por Basilius Besler, un botánico y herbolario del siglo XVII. Se trata de una obra maestra en el campo de la ilustración botánica que captura la belleza y diversidad de las plantas y flores de la época.
El libro se publicó por primera vez en 1613 y consta de una serie de grabados a color que representan meticulosamente más de 1,000 especies de plantas. Cada ilustración de Florilegium es detallada y precisa, y está acompañada de descripciones botánicas y notas de Besler sobre las propiedades medicinales y culinarias de las plantas.
Lo que distingue a Florilegium de otras obras similares es la forma en que Besler presenta las plantas. En lugar de organizarlas por su clasificación científica, las dispone según su temporada de floración. Esto da al libro una cualidad estacional única, ya que se puede apreciar cómo las diferentes especies florecen y se entrelazan a lo largo del año.
La atención al detalle en las ilustraciones es impresionante. Besler dedicó más de 16 años a recolectar y estudiar las plantas para asegurarse de que su representación fuera lo más precisa posible. Los grabados muestran cada hoja, pétalo y raíz con una precisión sorprendente, lo que demuestra el dominio artístico y científico de Besler. Los grabados sobre lámina de cobre que contiene Florilegium ilustran la espectacular diversidad vegetal de los espacios verdes del palacio del príncipe-obispo Johann Konrad von Gemmingen (1593/1595-1612) en Eichstätt, Baviera (Alemania)
Florilegium no solo es una obra de arte visualmente impactante, sino también una valiosa contribución al campo de la botánica. Durante su tiempo, ayudó a difundir el conocimiento sobre las plantas y su utilidad práctica. Hoy en día, el libro es apreciado tanto por su valor histórico como por su estética, y se considera una de las grandes obras de la ilustración botánica.
En resumen, Florilegium de Basilius Besler es un libro extraordinario que combina la precisión científica con la belleza artística. Sus ilustraciones detalladas y vívidas capturan la diversidad de las plantas y flores, y su enfoque estacional le confiere un encanto especial. Es una obra que sigue siendo apreciada y admirada en el campo de la botánica y más allá.