El melojo (Quercus pyrenaica) es un árbol imponente y hermoso que pertenece a la familia de las Fagáceas (Fagaceae), la misma que engloba robles y encinas. Conocido también como roble marojo, roble negro o rebollo, es originario de la península ibérica, y se caracteriza por su porte majestuoso y su abundante follaje. En este artículo, exploraremos en detalle la planta del melojo, desde su descripción y cuidados hasta las plagas y enfermedades comunes, así como su modo de reproducción.
Cómo es el melojo
El melojo es un árbol de hoja caduca que puede alcanzar alturas impresionantes de hasta 30 metros. Sus ramas se extienden formando una copa ancha y redondeada, lo que le otorga una apariencia muy ornamental en el paisaje. Sus hojas son grandes, lobuladas y de un verde intenso, lo que le confiere una gran belleza durante la primavera y el verano. En otoño, el melojo muestra su espectáculo de colores, cambiando sus hojas a tonos rojizos y dorados, creando un ambiente cálido y acogedor en el jardín.
El melojo tiene un tronco de forma irregular, derecho o retorcido, que forma ramas desde la base cuando es joven y las pierde con el tiempo. Durante sus primeros años forma una corteza lisa de color verde grisáceo que más tarde cambia a grisáceo para volverse parda y agrietada cuando el árbol es adulto. Tiene una raíz principal potente de la que salen muchas raíces secundarias superficiales en las que se forman nuevos brotes que pueden dar lugar a nuevos ejemplares. El fruto del melojo es una bellota gruesa que madura en otoño. Su sabor es amargo y sirve de alimento para el ganado en el campo.
En la base de los melojares se forma un suelo de muy buena calidad conocido como «tierra de melojar» que es rico en humus, potasio, fósforo y microelementos. Uno de los mejores sustratos para horticultura.
Cuidados del melojo
El melojo es un árbol resistente y de fácil cuidado. A continuación te describo algunas pautas para asegurar su crecimiento saludable:
Ubicación
Quercus pyrenaica prefiere áreas soleadas o semisombreadas, con suelos bien drenados y ligeramente ácidos.
Suelo
El melojo crece en terrenos de variada naturaleza que pueden ser desde arenosos a rocosos pasando por otros más o menos arcillosos.
Riego
Durante los primeros años, es importante mantener el suelo húmedo, pero evitando el encharcamiento. Una vez establecido, el melojo puede tolerar períodos de sequía moderada.
Poda
Aunque generalmente no requiere podas importantes, es recomendable eliminar las ramas dañadas o muertas para promover un crecimiento saludable.
Abonado
Se puede aplicar fertilizante orgánico en primavera para fomentar un desarrollo vigoroso.
Plagas y enfermedades del melojo
Afortunadamente, el melojo es resistente a muchas plagas y enfermedades comunes. Sin embargo, puede verse afectado por algunos problemas, como:
- Pulgones: estos pequeños insectos pueden colonizar los brotes jóvenes del melojo. Se pueden controlar mediante la aplicación de insecticidas naturales o lavando las hojas con agua y jabón suave.
- Oidio: este hongo puede afectar a las hojas del melojo en condiciones de alta humedad. Para prevenirlo, es recomendable evitar el riego por aspersión y mantener una buena circulación de aire alrededor del árbol.
Modo de reproducción del melojo
El melojo puede reproducirse tanto por semillas como por esquejes. Para reproducirlo a partir de semillas, se deben recolectar los frutos en otoño y dejar que se sequen durante unas semanas. Luego, se extraen las semillas y se siembran en macetas o en el suelo directamente. Para la reproducción por esquejes, se seleccionan ramas jóvenes en primavera y se plantan en un sustrato adecuado.
Mi opinión personal
Quercus pyrenaica es un árbol impresionante que puede añadir elegancia y belleza a cualquier jardín de buen tamaño. Con los cuidados adecuados, este árbol puede convertirse en un elemento destacado de tu paisaje, ofreciendo sombra, colorido y un toque de naturaleza salvaje. Aprovecha la oportunidad de cultivar un melojo y disfruta de sus múltiples beneficios estéticos y medioambientales.