Dentro de pocos días comienza el último mes del año, el frío ya se ha establecido en el jardín y los arbustos parecen dormidos. Los bulbos de primavera ya están plantados y parece que poco más queda por hacer hasta que llegue la nueva temporada.
Aún así todavía nos queda el recurso de jardinear un poquito dentro de casa. En estas fechas los amaryllis son muy populares, se pueden encontrar en todos los viveros e incluso en centros de bricolage y supermercados.
Amaryllis es un bulbo que se adapta muy bien al cultivo en interior. Después de unos cuantos días de frío, es suficiente llevarlo al ambiente templado de casa para que en poco tiempo rebroten sus hojas y comience a formar una nueva vara floral.
Esta planta no necesita una maceta muy grande, bastará con acomodarla en un recipiente con un diámetro algo mayor al del propio bulbo. Incluso un frasco de cristal reciclado de la cocina puede ser un buen tiesto para nuestra planta.
Se debe plantar en sustrato rico en nutrientes, dejando el cuello del bulbo al exterior y con cuidado de no dañar las raíces. Hay que colocarlo en un lugar cálido y con luz directa para que se desarrolle la vara floral, en cuyo extremo aparecerán las flores.
Esta planta requiere riego escaso al principio, poco a poco se aumenta la cantidad de agua hasta que la flor aparece y posteriormente se va aligerando de nuevo el riego hasta que las hojas se marchitan. Entonces, se cortan a ras y se deja reposar en lugar fresco hasta la siguiente temporada.
¿Qué otras plantas cultivas que sean típicas de esta época?
